Un buen líder sabe que el mayor activo de su empresa es su equipo, los representantes de su trabajo. Asimismo, el jefe exitoso se dedicará a crear una atmósfera tranquila y práctica, alejada de abusos y dictaduras que no harán sino minar la salud del equipo. Aquí las siete formas de crear un equipo que inspire al resto.
Reconociendo el esfuerzo: Es importante valorar las metas de tus empleados, para que en el próximo proyecto estos vayan más lejos. Nunca subestimes el trabajo de un empleado.
Construir fortalezas: Así las cosas, el buen líder sabrá qué sacar de cada empleado. Incluso sus grandes fortalezas que un trabajador puede obviar a priori de sí mismo.
Evitar un balance negativo siempre que no sea necesario: Está comprobado que estos son más difíciles de procesar que los positivos, ya que son analizados por otra parte del cerebro. ¿Merece la pena?
Alienta la capacidad de superación: Esto no ocurre fácilmente, ya que muchos jefes temen por su empleo cuando ven brillar a su inferior.
Enfocarse en la meta diaria, y mañana ya veremos: No abarcar demasiado es el truco, centrarse en la tarea del día y saber redistribuir la agenda según la jornada.
Apoyar a los empleados: No solo en lo económico, sino en lo personal dentro de la oficina y en lo profesional. No hay mejor recompensa que sentirse útil, házselo saber a tu empleado.
Cumplir las promesas: Si quieres un equipo con vistas futuras, deberás de hacerles saber que existe el compromiso mediante tus propias promesas, que deberás de cumplir.
Vía:forbes.es
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