¿Qué hace que queramos o no un cambio de trabajo?

¿Qué hace que queramos o no un cambio de trabajo?

¿Por qué hay personas motivadas a cambiar de empleo, y sin embargo, otras que se frenan ante un posible cambio? Estas son las motivaciones y frenos más frecuentes en el ámbito laboral: 

Las motivaciones que impulsan un proceso de búsqueda de empleo son:

Reconocimiento de la empresa contratante y tipología del proyecto. Formar parte de una compañía referente es una motivación para muchos candidatos. Además, si el proyecto supone una oportunidad para crecer profesionalmente, más segura es la aceptación de la oferta.

Beneficios sociales y conciliación. Los candidatos valoran cada vez más las ventajas sociales y la posibilidad de conciliar la vida laboral y familiar. 

Remuneración. El hecho de que el sueldo se corresponda con las funciones que se vayan a desempeñar y con la responsabilidad que se vaya a tener, es un factor fundamental que tienen en cuenta todos los candidatos.

Ambiente de trabajo. Un buen ambiente laboral es también uno de los factores más valorados. Las empresas lo saben, y muchas empiezan a destacar esta característica en la descripción de sus ofertas.

Autoestima profesional. Contar nuevamente con posibilidades de desarrollo profesional y crecimiento son aspectos psicológicos clave en las motivaciones de búsqueda.

Por el contrario, los frenos a la hora aceptar una oferta de empleo son:

Miedo a salir de la zona de confort.  Volver a empezar de cero es un riesgo que no todo el mundo está dispuesto a afrontar.

Desconocimiento de la salud empresarial de la compañía. Por mucha información que tengan de la empresa contratante, a los candidatos pueden surgirles dudas sobre la estabilidad de la nueva compañía, lo que puede hacerles recapacitar sobre la posibilidad de cambiar de empleo.

Remuneración. No llegar a un acuerdo con la empresa contratante o la no revisión del sueldo en el período estimado son las causas principales que hacen que los candidatos prefieran continuar en su actual posición.

Tamaño de la empresa y posibilidades de desarrollo. En muchas ocasiones, los candidatos no quieren dejar su puesto por otro en una compañía más pequeña, ya que piensan que las opciones de crecimiento serán menores que en una empresa mayor.

Distancia entre el domicilio y el trabajo. El tiempo y coste en llegar a la oficina son elementos que pueden determinar la aceptación o rechazo de un puesto, sobre todo en puestos de salarios más bajos.

Independientemente de los motivos que llevan a un candidato a buscar un nuevo empleo, el proceso de búsqueda requiere de tiempo y esfuerzo. Cuando este proceso dura más tiempo del esperado o el candidato no encuentra ninguna oferta que se ajuste a sus habilidades, la motivación inicial suele decaer. 

vía: RRHHpress.com

Sobre el autor

admin administrator

Deja un comentario